lunes, 23 de mayo de 2011

Patologías del aparato digestivo

Patología más frecuente del aparato digestivo

Cavidad bucal
Estomatitis
Inflamación de la mucosa de la cavidad bucal.
Gingivitis
Inflamación de las encías. Aparecen rojas, tumefactas y sangran con facilidad.
Glosititis
Inflamación de la lengua. Va asociada a un gran dolor y a fiebre.
Faringe
Faringitis
Inflamación o infección de la faringe. Provoca irritación y dolor de garganta, fiebre, tos y dificultad para tragar.
Amigdalitis
Infección o inflamación de las amígdalas palatinas.
Esófago
Esofagitis
Inflamación de la mucosa que tapiza el esófago.
Divertículos esofágicos
Herniación en forma de bolsa a través de la capa muscular del esófago.
Achalasia
Dificultad del esfínter esofágico inferior para relajarse y permitir el paso al estómago.
Estómago
Carcinoma gástrico
Tumoración maligna de la cavidad gástrica.
Páncreas
Pancreatitis
Trastorno inflamatorio del páncreas.
Hígado y vías biliares
Cirrosis
Enfermedad degenerativa crónica del hígado, normalmente, por abuso crónico del alcohol. También puede ser el estadio final de otras enfermedades hepáticas.
Hepatitis
Enfermedad inflamatoria del hígado: aumento en el tamaño de la glándula (hepatomegalia), ictericia, molestias abdominales y mal funcionamiento hepático con alteraciones analíticas.
Colecistitis
Inflamación de la vesícula biliar.
Intestino
Malabsorción
Alteración en la absorción de los nutrientes. La diarrea es el síntomamás frecuente.
Apendicitis
Inflamación aguda del apéndice vermiforme. Se acompaña de dolor en el cuadrante inferior derecho del abdomen, nauseas, vómitos, fiebre y alteraciones analíticas. Más frecuente en niños y adolescentes.
Diverticulosis colónica
Herniaciones de la mucosa intestina. Frecuente en personas de edad avanzada con hábito estreñido. Produce fiebre y dolor abdominal en cuadrante inferior izquierdo. Requiere tratamiento antibiótico inmediato.

Algunas de las patologías que se producen en el sistema gastrointestinal son bastante frecuentes.


A continuación, revisaremos aquéllas que, por su prevalencia entre los mayores o por su relación con la actividad profesional del auxiliar, se han considerado de mayor interés:


  • En el estómago.
Úlcera péptica.
Las úlceras son heridas que se producen en la mucosa del estómago a raíz de un aumento en la secreción gástrica ácida producida por estrés, hábitos alimenticios nocivos o determinados microorganismos como Helicobacter Pylori.
Lo más característico es la aparición de dolor en la parte superior del abdomen que aparece a los 30-60 minutos después de comer. Se puede asociar a pirosis (sensación de ardor). Es muy frecuente en personas con hábito tabáquico.
 
Vómito y náusea.
El vómito es la expulsión del contenido gástrico activamente por la boca. Se trata de un complicado acto motor dirigido por el centro del vómito situado en el bulbo cerebral. Los fenómenos implicados se desarrollan en la siguiente secuencia: el individuo experimenta una sensación desagradable referida al abdomen y cuello y asociada a las ganas de vomitar; a esta sensación se la conoce con el nombre de náusea. A continuación se ocluye el píloro y se relaja el cuerpo gástrico y el esófago de forma que, cuando se contrae la musculatura abdominal, el contenido del estómago es lanzado al exterior a través de la boca. El cierre de la glotis y la comunicación faríngea con la cavidad nasal hace que durante el vómito éste no siga una ruta equivocada dirigiéndose al árbol bronquial o nariz. A veces, el vómito se acompaña de otras manifestaciones como palidez, sudoración, taquicardia,...
Es un síntoma frecuente tanto en enfermedades digestivas como extradigestivas.
    

CARACTERÍSTICAS DEL VÓMITO
POSIBLES CAUSAS DEL VÓMITO
Restos alimenticios ingeridos.
Poco tiempo desde la ingesta.
Vómitos en ayunas.
Embarazo.
Acuosos (claros).
Alcoholismo.
Biliosos (amarillo verdoso).
Secreción gástrica.
Porráceos (verde).
Presencia de reflujo duodenogástrico.
Fecaloides (color y olor parecido a las heces).
Expulsión contenido intestinal.
Vomitos en posos de café.
Hemorragia digestiva.
Vómito que alivia.
Úlceras.
Características del vómito
   En el intestino.
Diarrea.
La diarrea es un trastorno intestinal caracterizado por la emisión de heces poco consistentes, generalmente con deposiciones frecuentes. Las heces contienen más cantidad de agua que en condiciones normales, por lo que podemos simplificar diciendo que la diarrea se puede deber a déficit de absorción intestinal, a aumento de la secreción o a tránsito acelerado.

- Defecto en la absorción: este mecanismo es el que se da en los síndromes de malabsorción. Los productos que no son absorbidos en el intestino delgado retienen agua que el colon no es capaz de absorber y el resultado es una diarrea acuosa.
- Aumento en la secreción: es el mecanismo que ocurre en las infecciones intestinales.Los microorganismos responsables potencian la secreción intestinal y se supera el mecanismo de absorción.
- Aceleración del tránsito intestinal: cuando el tránsito intestinal es muy rápido, no da tiempo a que se complete la absorción de los principios inmediatos, interviniendo por tanto un mecanismo mixto. El tránsito intestinal se acelera cuando existe un problema en la inervación de la musculatura intestinal; es decir, cuando el suministro de fibras o impulsos nerviosos no se produce correctamente (ej. diabetes); también se acelera cuando la pared se inflama o se fibrosa; es decir, cuando se vuelve rígida y poco flexible como consecuencia de una inflamación crónica.
En la evaluación de las causas de diarrea también se debe tener en cuenta el posible papel de los medicamentos: algunos antiácidos, diuréticos, antihipertensivos, antibióticos,etc., pueden ocasionarla al igual que determinados suplementos nutricionales.
Estreñimiento.
Es la evacuación infrecuente o difícil de heces. Una evacuación al día no es necesariamente lo normal. Consideramos un hábito estreñido cuando se producen menos de tres evacuaciones a la semana.
El estreñimiento puede ser agudo y limitado en un espacio breve de tiempo o, por el contrario, más duradero y deberse a otras causas.
Causas del estreñimiento
El estreñimiento puede ser causado por los viajes, los cambios en la dieta, algunos fármacos, el sedentarismo, el estrés, la ingesta de poca fibra o el abuso de laxantes.
Sin embargo hay trastornos propios del colon que a veces son los causantes:
- Tránsito intestinal lento por obstáculo mecánico: es el caso de los tumores que actúan comprimiendo y dificultando el paso a las heces.
- Tránsito intestinal lento por disminución en la motilidad del colon: algunos problemas de tiroides y alteraciones iónicas producen un “colon perezoso” que enlentece la evacuación.
- Retraso en la evacuación rectal: la debilidad de la musculatura abdominal hace que muchas veces la evacuación sea imposible. En otras ocasiones lo que ocurre es que se ha perdido el reflejo de la defecación porque se han reprimido en muchas ocasiones las ganas por “falta de tiempo”, por pereza o por lesiones anales que provocan grandes molestias.

Tratamiento del estreñimiento:
El tratamiento del estreñimiento comienza con establecer unas medidas generales:
- Modificar la dieta: aumentar el consumo de líquidos, aumentar el consumo de alimentos ricos en fibra y limitar el de aquéllos otros que no contienen fibra o que endurecen las heces (azúcar, quesos curados, arroz,...)
- Hacer ejercicio físico regular, sobre todo aquél en el que intervienen los músculos abdominales.
- Intentar mantener un hábito de acudir al baño de forma regular, dedicando el tiempo que sea necesario. Fijaremos una hora determinada cada día y procuraremos estar tranquilos y asegurar nuestra privacidad. Nunca ignoraremos el deseo de vaciar nuestro intestino.
El tratamiento farmacológico del estreñimiento deberá ser siempre individualizado y prescrito por un médico. Se instaurará una vez se hayan descartado causas obstructivas y hayan fracasado las medidas no farmacológicas.
Existen diferentes clasificaciones de los laxantes. La más práctica utiliza el mecanismo de acción como criterio de clasificación:   
Laxantes formadores de masa: son aquéllos que aumentan el volumen y ablandan las heces. El salvado de trigo (30 gramos diarios) y la cáscara de Psyllium o Plántago Ovata (3.5-7 gramos diarios) son algunos ejemplos.
Laxantes osmóticos: son sustancias que se absorben muy mal y atraen agua y secreciones a la luz intestinal. Utilizan el mismo mecanismo que la diarrea por déficit en la absorción. Hay que usarlos con precaución por el riesgo de deshidratación que conllevan. Son laxantes osmóticos las sales de magnesio, sodio, lactulosa y lactitol.
Laxantes estimulantes: aumentan la secreción intestinal y la motilidad. Destacan el bisacodil, senósidos y picosulfato sódico. Deben usarse por periodos muy cortos de tiempo.
Laxantes emolientes o ablandadores de heces: humedecen y ablandan las heces para que se mezclen mejor con el agua y lípidos. También aumentan lasecreción de agua. El aceite de parafina y el ducosato son los más empleados.
Laxantes rectales: se administran como enemas o supositorios. En general, los supositorios son menos irritantes que los enemas. El supositorio más utilizado es el de glicerina que es efectivo cuando la ampolla rectal está llena de heces. De los enemas, el más empleado es el de fosfato a dosis de 125 ml. Con los enemas existe riesgo de producir alteraciones iónicas en el paciente incluso a dosis única, por lo que no se debe abusar de ellos.

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